LA
ESCUELA SECUNDARIA COMO ESPACIO DE CONSTRUCCIÓN DE IDENTIDADES JUVENILES.
Las
escuelas son parte fundamental para la construcción de identidad, la edad de
los educandos y el nivel en que se encuentren serán parte fundamental en su desarrollo, recorriendo caminos más
compresivos e interpretativos. En base
distintas investigaciones, los estudios alusivos a los jóvenes
demuestran vías para la compresión de la misma la metodológica nos demuestra
una perspectiva en base a los conocimientos de los alumnos.
Las
culturas juveniles como caracteres relacional, nos pone en un proceso de identificación
y diferenciación. La construcción de la identidad es proceso vital y permanente
de la vida, las relaciones sociales son parte de ella, sin embargo no todos son
parte de los grupos, algunos individuos quedan excluidos mientras que otros forman
parte y toman posiciones ante la sociedad.
Una
investigación de campo de 2005 a 2006. En la que se llevó a cabo una entrevista
a 36 alumnos, se realizó un análisis comprensivo, para revelar patrones,
características y algunos resultados fueron perfiles de alumnos los cuales son
formados en la escuela. El artículo está dividido en cuatro partes el primero
“cruce de culturas y sentidos” que cosiste en la experiencia del adolescente en
la escuela que le permite mostrarse, la condición adolescente proviene de las
instituciones a partir de la subjetivación,
redefinición y resignificación de la sociedad y escuela.
Las
instituciones no pueden verse solo como un espacio de enseñanza, se estaría
limitando esta complejidad forma parte de intereses y significados de los
adolescentes. El segundo “identidades en reconstrucción entre la adaptación y
la sobrevivencia” esta se centra en la redefinición y resignificación, el
tercero es “Escuela, socialidad e
identidades” y el ultimo es “Adolescencias estudiantiles”.
Para
los adolescentes las secundarias son espacios para compartir, y disfrutar,
otros como espacios privilegiados para su formación como individuos en la
modalidad de individual y colectivos, para otros jóvenes las escuelas no tienen
nada por dar, no existe interés por parte de ellos.
La
secundaria es un espacio afectivo, para los adolescentes no importando las
sanciones o normatividad, es un espacio de convivencia, relajo, payasadas, etc.
Aquí los jóvenes pueden construir su identidad con ayuda de la convivencia en
comunidades. Los profesores sólo logran visualizar desde cierta perspectiva
al alumno, es decir en la parte educativa, no se preocupan por los gustos.
Para
las mujeres las son espacios de libertad,
un lugar donde se puede actuar y expresarse, distintamente a comparación de situaciones específicas por
ejemplo una Sena familia, platicar con padres, etc. Se le podría considerar a
la escuela como el lugar de libertad de expresión actúan como son sin temor a nada.
En otras entrevistas calificaban a las instituciones como un lugar muy
normativo, es decir un espacio de controles
excesivos sobre donde el diálogo y la expresión son limitados.
Para
algunos alumnos aplicados la diversión y fiesta, es también desorden, y
descontrol, vemos que las perspectivas para los jóvenes hacia la escuela es
diversifica. Algunos perciben a las instituciones como espacios de formación,
alumnos íntegros centrados en la formación académica antes del desorden o
descontrol, creen en docentes preparados, y por un futuro acompañado de una
formación.
La
adaptación y la sobrevivencia, a partir de la experiencia escolar relacionada con una forma de ser estudiante, estas
relaciones con lleva a elaborar nuevas y diversas identidades, se construye en
la tensión y forma de ver las personas. La sociedad y la cultura de los jóvenes
contribuyen a la formación del individuo, el desarrollo de jugos en donde los
alumnos están dentro por distintos interés contribuyen a lo político, económico
y lo social, esto pasa al compartir características dentro de las escuelas.
Para
los adolescentes las escuelas tienen significados distintos, al de los
profesores que buscan cumplir los
propósitos académicos, y que consideran a las instituciones como espacios de
aprendizajes, la experiencia escolar de los adolescentes es un elemento
constitutivo importante de las identidades juveniles, significa que en las escuelas aprenden valores actitudes y
habilidades que les servirán para ser parte de la sociedad.
La
experiencia escolar y la identidad van de la mano, a partir de las relaciones
entre los jóvenes (otras identidades) los aprendizajes serán de suma
importancia para que los individuos puedan construir su identidad y puedan ser
parte de una sociedad, por ende podrán tener autonomía, madurez, preparación,
etc.
La
diversidad de identidades, en las escuelas como no necesariamente es
contradictoria a los propósitos curriculares. Los adolescencias con altas
expectativas y los que no proponen un sistema educativo-social, uno donde
tengan la finalidad de crear aprendizajes significativos y que sea un lugar de
confianza.
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